LA GUERRA EN EL PACÍFICO - PEARL HARBOR (CAP. 14)


Los japoneses tienen un proyecto similar al alemán, saben que finalmente se tendrán que ver las caras con EEUU, deciden madrugarlos y atacar la base de PEARL HARBOR. EEUU entra a la guerra. Y la balanza, lentamente, empieza a inclinarse para los aliados. No se pierdan este capítulo, MUY BUENAS PELIS RECOMENDADAS. Que lo disfruten...

LA GUERRA DEL PACIFICO Y EL ATAQUE A PEARL HARBOR


Y LOS JAPONESES ¿PARA QUÉ SE METEN?


¿Cómo llegamos de la guerra en Europa a la guerra en Asia y el Pacifico? ¿Cómo y para que se metió Japón en la guerra?

Japón siempre fue un pueblo con una profunda y riquísima cultura propia, es una sociedad de un alto nivel espiritual, que se relaciona con los espíritus de la naturaleza (shintoismo) a través de la belleza. En los siglos 15 y 16, Japón toma contacto con occidente (portugueses, ingleses, etc.) y se dan cuenta que los occidentales son disociadores, que tienen armas muy poderosas (ya en esa época) y que tienen permanentemente disputas entre ellos por cuestiones religiosas, territoriales, etc. Después de lo que ven de occidente, deciden cerrarse durante 3 siglos, en los que “nadie entra ni sale de Japón”, prefieren no relacionarse de ninguna manera con los occidentales. En ese período, desarrollaran hermosas culturas y continúan plácidamente, con su vida pseudo medieval de los samuráis, los shogunes, las geishas, el origami, etc. Pero en el siglo 19, la expansión norteamericana, lleva a los estadounidenses a Japón. Frente al ataque, los japoneses se dan cuenta, que ellos no han evolucionado nada. Los norteamericanos les dan el plazo de 1 año para abrirse a occidente, sino lo harán por la fuerza. Estos son los acontecimientos que narra

# El último samurái (película con Tom Cruise)

Forzados a la apertura, los japoneses emprenden un proceso profundo de transformación y modernización (los ejércitos profesionales reemplazan a los samuráis). Se industrializa a marchas forzadas para relacionarse con occidente, para evitar que éste los devore como les ha ocurrido a los pueblos vecinos que han sido colonizados por los europeos. Mientras Japón está metido en este proceso de industrialización, China se atomiza, el confucionismo entra en crisis y no puede adaptarse a la modernidad. Podemos ver esta secuencia de la historia y la que vendrá a continuación en

# El último emperador (de Bernardo Bertolucci, ganadora del Oscar)

Japón se encuentra principalmente con dos problemas que debe resolver en el corto plazo: la creciente población y la correlativa escasez de materias primas. Con respecto a la población, comienzan una política activa de migración oficial, deportando colonias enteras de japoneses (fundamentalmente a Perú, Brasil y EEUU). Con respecto a la escasez de materias primas, posan sus ojos en china (específicamente en la Manchuria) que los tiene en cantidades.

Dentro del proyecto modernizador e industrialista de Japón hay dos tendencias: quienes quieren un Japón grande pero no necesariamente expansionista y militarista; y quienes sí lo quieren (que serán los que a la postre vencerán en la puja de poder dentro de la dirigencia japonesa). Comienzan por invadir Corea (a principios del siglo 20), y a continuación van por su objetivo de máxima: la Manchuria. Allí gobierna, Pu Yi el último emperador, quien luego de la invasión japonesa en los años 30 y de rebautizar la región como Manchukuo, se convertiría en un gobierno títere del imperio japonés, que legitime la invasión japonesa a China.
Los japoneses van dándole forma a una teoría del espacio vital bastante parecida a la alemana, y la superioridad racial se verá cumplimentada con la idea que los japoneses tienen de ellos mismos como Hijos del Sol naciente, como civilizadores del Asia.

Nuevamente, como ya sucediera con el pueblo alemán (pueblo que ha dado a los más grandes pensadores y artistas), cabe aquí preguntarse cómo un pueblo tan hermoso y espiritual como el japonés, se vio envuelto en semejante delirio, cometiendo las atrocidades de las que sería capaz en su expansión por Asia. ¿Cómo tienen lugar estas dualidades del espíritu de los pueblos? Una respuesta parcial, puede ser que Japón para modernizarse y relacionarse con occidente sin ser fagocitado por éste, perdió en ese camino de la modernización, muchos de sus valores tradicionales.

La cuestión es que Japón sabía que de seguir adelante con su proyecto expansionista, tarde o temprano debería enfrentarse a EEUU, quienes desde la época de Roosevelt venían expandiéndose hacia el Pacífico. Además, los japoneses no se olvidaban que eran los norteamericanos los que en el siglo anterior habían forzado la apertura del Japón. El territorio en disputa sería el control del Pacífico y las islas que allí se encuentran.

 

EL ATAQUE A PEARL HARBOUR

Así que los japoneses pensaron que ya que el conflicto era inevitable por qué mejor no madrugaban el ataque y, como dice el saber popular “el que pega primero, pega dos veces”. Mejor hacerlo ahora que estamos en la plenitud de recursos, a  que nos invadan ellos luego cuando estemos más baqueteados. Así el 7/12/1941 bajo la clave Tora Tora Tora, los japoneses atacaron la base norteamericana ubicada en Pearl Harbor, Hawaii. Comparado con las terribles batallas, bombardeos y otras atrocidades que se llevaron a cabo en esta guerra, la verdad es que Pearl Harbor no fue, ni por mucho, la más terrible, ni la más grande, ni la más contundente. No fue el impacto de las pérdidas, sino la sorpresa de verse atacados por 1ª vez lo que decidió a la opinión pública estadounidense, hasta ese momento renuente de que su país interviniera en una guerra ajena, a impulsar a que Franklin Roosevelt le declare la guerra al Japón.
Monumento al acorazado USS Arizona en Pearl Harbor, Hawai

Y así, EEUU entro en la 2da GM. Sin el aporte en tropas, armamento y recursos inagotables, que los norteamericanos aportaron, difícilmente la guerra hubiera tenido el resultado que acabó teniendo. EEUU entró fresquito a la guerra, con una industria pujante, sin bombardeos, sin guerra en su territorio, con ilimitados recursos. Al declararle la guerra a Japón, Alemania se la declara a EEUU, y ahí se arman los frentes. Los norteamericanos deciden que es prioritario detener a Hitler en Europa y África del norte, así que comienzan por allí.

Mientras tanto Japón, después del ataque a Pearl Harbor, inicia un plan de guerra relámpago y en 6 meses invade: Filipinas, Malasia, Singapur, Indonesia, Indochina, Birmania, Nueva Guinea. Muchos de esos territorios eran colonias francesas, así que siendo los japoneses aliados de Alemania, y los alemanes controlando Francia, los japoneses les preguntan a sus aliados “¿les molestaría que nos tomáramos esos territorios?” y así van avanzando. Por el lado del Pacífico, los japoneses quieren crear un escudo de islas para protegerse de los ataques norteamericanos. Ningún avión de la época tiene autonomía suficiente como para llegar desde EEUU a Japón, bombardear y volver. Por lo tanto, las islas del Pacífico son, para los norteamericanos, plataformas de despegue para poder acercarse a bombardear Tokio y las demás ciudades japonesas; para Japón son el escudo que los mantiene a salvo. Con este escenario la guerra en el Pacífico y en Asia tendrá dos frentes: el continental, donde los japoneses se enfrentaran a los ejércitos coloniales de los territorios que van invadiendo; y la guerra en el mar contra la flota de EEUU, donde se luchará encarnizadamente isla por isla, y donde los protagonistas excluyentes serán los portaaviones.

TAMPOCO ERAN CARMELITAS DESCALZAS


La incursión japonesa en el continente fue igual de terrible que el avance alemán por Europa. Con las variantes propias: en Europa se pretendía que se aplicara la Convención de Ginebra sobre prisioneros de guerra y el trato que debía dispensárseles. Pero para la cultura japonesa, un prisionero, es alguien que se rindió; y si se rindió es que no tiene honor. Y alguien que no tiene honor, no merece ser tratado como un ser humano. Y así trataban a los prisioneros. El ferrocarril que unía Tailandia y Birmania, conocido como el Ferrocarril de la muerte, lo construyeron los japoneses a través de la selva para apoyar y enviar refuerzos a sus tropas en Birmania. Para la construcción se usaron prisioneros, y se calcula que cerca de 200.000 personas murieron en la empresa.

# Puente sobre el rio Kwai (película ganadora del Oscar)

También realizaron experimentos sobre seres humanos, como lo hacían los alemanes. Prostituyeron a la fuerza a mujeres de los países ocupados y las trasladaban como “mujeres de confort” junto con la tropa, para darle diversión a los soldados y oficiales, a medida que se iban trasladando.

VOLVIENDO AL FRENTE DE BATALLA


Hasta este momento de la guerra, tanto en Europa como en el Pacífico, los alemanes y los japoneses eran imparables, los aliados resistían (cuando podían) pero no estaban en condiciones de contraatacar. Es recién para 1942/43 cuando los aliados empiezan a organizarse, a elaborar estrategias en conjunto y aunar recursos para poder contraatacar, en todos los frentes. En el Pacífico, el punto de inflexión será la batalla de Midway. En este frente de la guerra, vamos a ver aparecer una nueva forma de contienda, donde los principales protagonistas serán los portaviones, y las batallas serán fundamentalmente aéreas y marítimas. Es aquí donde los japoneses despliegan a sus kamikazes, que eran pilotos suicidas que se estrellaban contra la línea de flotación de los barcos norteamericanos para hundirlos. Esta táctica, como muchas de las costumbres japonesas tiene su origen en el misticismo y en la naturaleza. Cuando en el siglo 12, los mongoles en su expansión, quisieron invadir Japón, unas tormentas salvadoras arrasaron con la flota mongola, salvando así a los japoneses. Los vientos “mágicos” de esas tormentas eran los Kamikazes. Los norteamericanos no sabían cómo reaccionar antes estos ataques suicidas, porque en occidente, y especialmente en EEUU hay un fuerte concepto del individuo, y si bien todo soldado está dispuesto a morir por su patria, se busca salvar la vida. Para los japoneses, con un concepto del honor totalmente diferente, donde la muerte significa victoria y enaltece a quien la afronta, inmolarse por la patria es la forma de tener honor.
Piloto kamikaze japonés



La próxima semana nos volvemos a trasladar al frente ruso para conocer los pormenores de la batalla más sangrienta de la guerra: STALINGRADO.
Hasta la próxima...

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