LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL (Capítulo 1)

A partir de hoy y semanalmente iré subiendo material sobre grandes eventos del siglo XX. Este material es parte de una investigación que estoy realizando sobre la historia política, filosófica y jurídica del siglo pasado, pero con un enfoque que no hace hincapié en el el rigorismo histórico de fechas, cronologías y acontecimientos. Sino que busca comprender profundamente la concatenación de la historia, por qué ocurren los acontecimientos, cuáles son las causas, qué corrientes de pensamiento surgen para apoyar o explicar la historia, cómo el derecho acompaña la evolución de los acontecimientos. 

Todas las actividades humanas: la política, la filosofía, la economía, el derecho, el arte están intimamente encadenadas entre sí. Comprender los acontecimientos de una época significa al mismo tiempo entender el pensamiento, las manifestaciones culturales, las corrientes de esa época. 

Siempre me costó recordar fechas y detalles, pero me bastaba ubicar cualquier personaje o hecho histórico en un lugar y un siglo para entender de qué se trataba. Siempre entendí a la historia de esa manera. Sostengo que si uno puede comprender las características propias de una época, de un período, automáticamente puede ubicar eventos y personas en esa época; pero mejor aún puede hilvanar la historia de la humanidad desde el comienzo de los tiempos, puede ver el hilo que va uniendo unos eventos con otros. Nada fue casualidad, y el rastro se puede seguir desde la antigüedad hasta nuestros días. El mundo en el que hoy vivimos, no surgió de la nada ni es azar nada de lo que ocurre, y solo seguir el hilo de la historia nos permite encajar cada pieza en su lugar y entender cómo y por qué estamos donde estamos y nos pasa lo que nos pasa.

Estos capítulos que iré subiendo, están basados en un podcast de una historiadora colombiana, llamada Diana Uribe que explica la historia así, tal cual yo siempre la entendí. 

Al final de cada capítulo, agregaré algunos links de material adicional (videos, libros, películas, etc) que puedan sumar a la comprensión de los sucesos relatados en el capítulo.
El capítulo de hoy comienza con la 1a guerra mundial y a partir de allí damos por inaugurado el Siglo XX.

Espero que lo disfruten...


INTRODUCCION


Las dos guerras mundiales, no son eso; sino por el contrario, son la misma guerra en dos capítulos.

Entender lo acontecido en ambas guerras es fundamental, porque el mundo en el que vivimos quedo montado sobre las consecuencias de estos enfrentamientos: los organismos que se crearon, las decisiones más importantes (conferencias de Yalta y Potsdam), el estado benefactor, el voto femenino en Gran Bretaña después del sacrificio realizado por las mujeres inglesas en la 1ª guerra, la era atómica, el resurgimiento de naciones,  la aparición de nuevos países, la bipolaridad internacional.

La 1ª guerra mundial (1914-1918) es conocida como “La caída de las águilas”, “La gran guerra”, “La guerra que acabaría con todas las guerras”. Lamentablemente esto último no fue cierto. En este conflicto se van a enfrentar por un lado las potencias: Inglaterra, Francia, Rusia, y finalmente EEUU; y por el otro lado los imperios: el imperio austro-húngaro, el imperio alemán y el imperio turco-otomano. La denominación de “la caída de las águilas” justamente se refiere a que la guerra terminó con las grandes dinastías de Europa.

En Europa existía, por entonces, un complejo sistema de alianzas. Apoyado en ese sistema, cuando Austria-Hungría le declara la guerra a Serbia (por el asesinato del archiduque Francisco Fernando), Alemania se ve obligada a apoyar a su aliada. Alemania no fue la que desató el conflicto. Y para colmo de males, hacia la mitad de la guerra, su aliada Austria, otrora tan poderosa y temida, comienza a desmoronarse bajo el peso de sus propias falencias. Así, Alemania, quedó sola en una guerra que no empezó y que a pesar de tener que afrontarla en soledad, no le estaba yendo tan mal. Había logrado correr de en medio a Rusia, y en el frente Occidental, presentaba batalla digna a Francia, Inglaterra, y EEUU. Por eso cuando se declara el armisticio (noviembre de 1918) y unos meses después se reúnen a firmar el Tratado de Versalles, los representantes alemanes, van bastante confiados de poder obtener una negociación conveniente, o cuando menos digna. No ganaron la guerra, pero tampoco la perdieron estrepitosamente. Pero la tortilla se da vuelta, cuando Francia toma las riendas de la negociación y humilla a los delegados alemanes. El Tratado de Versalles termina siendo una vergüenza, venganza pura y dura. Alemania no solamente sale del Salón de los Espejos con las manos vacías sino que termina siendo declarada la culpable del conflicto (como si la guerra la hubiesen comenzado los alemanes) y responsable de todos los horrores ocurridos a lo largo de la contienda. Le cercenan parte de su territorio, le prohíben tener ejércitos y le imponen unas sanciones económicas y costos de reconstrucción que la dejarán hundida en la miseria y en la humillación. Curiosamente, no sólo Alemania se siente estafada, también le ocurre a Italia, aunque por otros motivos que analizaremos más adelante. Esta sensación de frustración, de que las potencias los están estafando y no los tratan con el respeto que se merecen, esta sensación de injusticia y venganza, es el suelo fértil sobre el que sembrarán los totalitarismos del período entre guerras. Mussolini en Italia y Hitler en Alemania, levantarán a sus naciones sobre el discurso de la grandeza del pasado, de la inequidad con que han sido tratados y el orgullo de la nación. Sobre esas bases, Europa se dirige directamente hacia la 2ª guerra mundial, no sólo sin haber aprendido nada de la 1ª sino dispuestos a correr los límites del horror y la barbarie a formas inimaginables. La 2ª guerra se inicia para terminar todo lo que acabó “mal terminado” en la 1ª. Y por supuesto, como siempre que se combate fuego con fuego, acaba cien veces peor.

Pero antes de embarcarnos en el análisis de los hechos y los acontecimientos es necesario reflexionar sobre una serie de interrogantes:

1.    1.  ¿Por qué los europeos que habían llegado a tal grado de civilización *, cuando más cerca estaban de alcanzar su esplendor, se caen al abismo?
*Habían desarrollado:
- La teoría de la evolución
- La idea de progreso basado en el conocimiento científico
- La tecnología que libraría al hombre de la esclavitud
- Los sistemas económicos que plantearían las opciones (liberalismo/socialismo)
- Las ideologías utópicas
- Un nivel superlativo en lo cultural, filosófico y artístico
- La idea de que el progreso permitiría alcanzar condiciones de bienestar, democracia, libertad y sustentabilidad

2. ¿Cómo es posible que la Razón se “suicide” dos veces en el mismo siglo?

3. ¿Cómo una civilización que lleva 6 o 7 siglos en construcción, pueda, en su madurez, arrastrar al mundo a tal nivel de destrucción?

4. ¿Por qué la guerra se vuelve “mundial” y no se limita a un conflicto europeo, como los había habido desde siempre?

5. ¿Por qué si la mayoría de los dirigentes de los países que participan en la guerra son descendientes de la reina Victoria, no resuelven sus diferencias en “una cena familiar” en lugar de arrastrar a la muerte y la destrucción a millones de personas?

6. ¿Por qué si el siglo 19 le perteneció a Inglaterra, y la situó a años luz del resto; por qué si en Alemania se desarrolló el punto más alto en el pensamiento filosófico y aparece música como la de Beethoven, por qué donde aparecen estos picos de la cultura, van a pasar semejantes barbaridades?

Entonces, si los europeos eran la encarnación de la civilización, de la Razón que venía desde la época de la Ilustración (e incluso antes con Descartes y Copérnico) y que servía como faro para la creación de un mundo más justo; si en el discurso de la razón está el discurso de los DDHH (conceptos de ciudadano, de libertad) ¿Cómo va a llegar la razón a suicidarse de tal manera?

Esbozaremos en este capítulo una breve semblanza de la situación geopolítica de Europa al comienzo de la guerra. Todos los elementos que confluyen, los iremos desglosando en capítulos siguientes.

1.      Imperios: ya mencionamos que uno de los bandos de la contienda estaba formado por Imperios. En el caso del austro-húngaro y del turco otomano, ya en sus instancias de decrepitud, la guerra terminará por desarticularlos. En el caso de Alemania, era de reciente formación, y su vida será bastante breve.


2.      Potencias: el bando de las potencias Francia, Inglaterra, Rusia y EEUU se encuentran todas en distintos estadíos de desarrollo y poder. El siglo 19 las había erigido, a las 3 europeas fundamentalmente, en los países más poderosos y temidos del mundo. En el caso de los americanos, estaban creciendo a pasos agigantados y calentando sus motores para salir al ruedo de la geopolítica internacional y probarse el traje de potencia dominante.


3.      Alianzas: el sistema de alianzas que regía en Europa y sobre el que se mantenía el equilibrio de poder entre las potencias, buscaba que ningún país fuera lo suficientemente poderoso como para poder enfrentarse solo a todos los demás juntos. De esta manera, las alianzas buscaban equilibrar el dominio de los más poderosos. Llegado el caso, como ocurrió en la 1ª guerra, el sistema arrastró a varios países que no tenían intención de enfrentarse a otros y que nada ganaban con la guerra, pero que quedaron obligados a intervenir cuando sus aliados lo hicieron.


4.      Nacionalismos: veremos cómo influyeron los movimientos nacionalistas, la unificación como estados nacionales tardíos de Alemania e Italia, el proyecto nacional de Serbia (la gran Serbia); el proyecto paneslavo y pangermano.


5.      Socialismo: al mismo tiempo que los países jugaban a la guerra en el ámbito internacional; en su política interna enfrentaban conflictos de la mano de los movimientos socialistas. Las duras condiciones de trabajo, las inequidades del sistema capitalista liberal, las críticas de Marx y la pobreza reinante en grandes porciones de la población en los países más ricos del mundo, son un factor más a sumar a la multiplicidad de elementos que confluyen en el contexto histórico.


6.      Eurocentrismo: la civilización europea a lo largo del siglo 19 se había erigido como “LA civilización”. El eurocentrismo es aquel que  considera que el conocimiento desarrollado por Europa era civilizador, y el único válido y verdaderamente científico. Los conocimientos de otros pueblos, sin importar qué tan ancestrales fueran, eran automáticamente descartados y considerados como barbarie, ignorancia o superstición.


7.      Colonialismo: Basados en el eurocentrismo, el colonialismo había justificado el sometimiento de tantos pueblos de la Tierra, porque su conocimiento se consideraba superior, más profundo y más complejo. Y consideraban que al “civilizarlos” les estaban haciendo un favor sacándolos de la ignorancia y la barbarie. El conflicto, entre otras cosas se universalizó, ya que al tener colonias las potencias participantes, y traer ejércitos desde sus colonias, esto se trasladó a muchos lugares de la Tierra.


Esta guerra, la “gran guerra”, iba a ser diferente a todo lo que se conocía hasta entonces. Hay una teoría que dice que todos pelean la guerra presente como se peleó la anterior. Entonces, pelearon la guerra de trincheras como se habían peleado las guerras de batallas, pero esta vez era diferente. La capacidad de fuego  y de destrucción que  tuvo  la 1ª guerra mundial nunca antes había existido.

 Una generación completa quedó bajo los campos de Europa, los más jóvenes, los más fuertes, los más fértiles, los que podrían haber aportado al mundo grandes descubrimientos u obras artísticas (porque el capital humano es irremplazable) fueron masacrados inútilmente, no en una guerra sino en dos.

El concepto de guerra que se manejaba hasta entonces, era el de los soldados  en los salones de baile, con sus uniformes inmaculados y sus cascos con plumas, con su gallardía y honor. Pero en esta guerra les tocará enfrentarse con los nidos de ametralladoras, las trincheras con ratas y piojos, el gas mostaza, los lanzallamas, la arrogancia de los generales y sus estrategias inútiles que no tendrán respeto alguno por la vida humana. Todos los límites serán traspasados en esta guerra y aún más en la segunda.  Las armas modernas no permitían el honor de las batallas medievales en las que se enfrentaban caballeros. Los asesinatos son masivos. Las trincheras entierran los ejércitos y allí, avanzar no significa nada y cuesta enorme cantidad de vidas.

Comenzaremos el relato con la Europa del siglo 19, ya que es ahí donde se empieza a “cocinar” lo que ocurrirá a principios del siglo 20.
Después de las guerras napoleónicas (1812/1815) se “inventará” un Orden mundial conocido como la Santa Alianza; liderada por Austria (ideada por Metternich). Va a tener dos propósitos definidos: evitar que una guerra en territorio europeo se esparza y se transforme en una guerra europea (porque no hay quien las pare, las guerras napoleónicas habían llegado hasta Rusia y habían comprometido todo el continente), y reducir a  Francia  hasta los límites actuales. La idea de la Santa Alianza era retroceder todo lo que había pasado desde la revolución francesa, impedir que futuras revoluciones se expandieran sobre Europa, y que los conflictos europeos se volvieran imparables. Esta Santa Alianza estará en contraposición con las “revoluciones románticas”, las revoluciones por los parlamentos (muchos estados están todavía bajo regímenes de monarquías absolutas). El orden de la Santa Alianza, que encabeza Viena va a lograr cierta estabilidad y le dará a Europa 90 años de paz, no porque no hubiera conflictos y revoluciones, sino porque ninguno de estos conflictos y levantamientos llegó a tener carácter continental.

Hacia fines del siglo 19, aparecen dos estados nacionales, que antes no existían. Alemania  se conforma como nación alrededor del ideal del proyecto militar prusiano. Los pueblos germanos existen desde hace mucho tiempo, pero nunca se habían unificado como nación. Dentro del proyecto de unificación también había posiciones encontradas: el káiser quería una Alemania expansionista y con una armada poderosa; mientras que Bismark sostenía que era suficiente una Alemania fuerte y poderosa sin necesidad de expandirse ni tener una armada (lo que indefectiblemente llevaría en algún momento a enfrentarse con Inglaterra). El káiser ganó la pulseada. Alemania se unificó y está decidida a salir a la historia.

Y también hay una Italia que se unificó, no alrededor de un proyecto militar, sino alrededor de un proyecto político dirigido por Giuseppe Garibaldi. Italia nunca se había unificado porque estaba formada por muchas ciudades estado, y esas ciudades eran tan poderosas en tiempos del Renacimiento que ninguna pudo someter a las otras, como tampoco nunca pudieron dirimir las diferencias entre el papa y los reyes.  Garibaldi estableció un sistema de alianzas con los distintos principados y a partir de esas alianzas fue unificando la nación.

En los Balcanes, Serbia también se consolida como estado nacional y tiene un proyecto de grandeza “La gran Serbia”.
Todo el conflicto comenzó en los Balcanes, a pesar de que toda Europa los despreciaba como a primos segundones de esta Europa esplendorosa. Aunque a pesar de haber empezado allí, no será en los Balcanes donde cobre su mayor dramatismo.


El equilibrio de la Santa Alianza se rompe  porque aparecen nuevos bloques de poder. El nuevo orden, por la aparición de estos nuevos actores, será un orden de alianzas simples. Entonces, Inglaterra y Francia, que fueron acérrimos enemigos durante 800 años, ahora hacen las paces de manera tan amistosa que esta alianza se conocerá como Entente Cordiale. Luego, ambos se alían con la Rusia zarista, de Nicolás II (un imperio colosal en manos de un hombre imbécil, cuyos antepasados habían expandido a Rusia de manera extraordinaria anexando el Cáucaso y el Asia central). El otro bando será la naciente Alemania con el Imperio austrohúngaro (que está en un periodo crítico porque su emperador, un hombre de honor no comprende que las épocas están cambiando).


Links


www.youtube.com/watch?v=3XtXgH4YSrU (La 1ª GM contada en 7 minutos)



https://www.youtube.com/watch?v=1nkdW32mLcc (Sin novedad en el frente 1979)
Novela de un soldado alemán que luchó en la 1° guerra mundial y cuenta las penurias de la vida en las trincheras. La novela fue llevada al cine, protagonizada por Richard Thomas y Ernest Borgnine

https://www.youtube.com/watch?v=FTI9zWU1dEI (Apocalipsis: La 1ª GM – Cap 1)
1er capítulo de una serie de documentales de producción francesa que muestra de qué manera todos elementos que analizamos en el presente post confluyen en el inicio de la guerra con excelentes imágenes a color de la época.

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